Se llevó un cero // 1ra A Cap XIX

En un partido excesivamente cerrado, Sholem de Buenos Aires empató 0-0 ante AjCoaj. Con el punto, la Reserva alcanzó las 38 unidades, sigue tercera, aunque acompañado. El Venado y El Sosiego, próximo rival, también pugnan por meterse en el podio. La Primera tuvo otro domingo para el olvido. Pagó caros sus errores y perdió 5-0.

Por Yorugua Amigo

Las voces estaban divididas. El 0-0 dejó miradas contrapuestas. Los más optimistas reclamaban un triunfo que no fue. ¨Era para ganarlo¨, aseguraban. Otros quedaban conformes con la actuación y el punto. Resaltaban la importancia de no caer ante AjCoaj, una institución histórica y de peso propio en Faccma. Sólo una conclusión aglomeraba a todos: el duelo fue un bostezo, un bodrio enorme, un encuentro tan chato como la milanga fría y nerviosa post-partido.

A priori, Sholem tenía que ganar para mantener su lugar en la tabla. Necesitaba los tres puntos
para manejar su destino -sin depender de nadie- y quedar algo más cerca del objetivo de poner su nombre entre los tres primeros del torneo. Pero durante el transcurso del juego empezó a mirar con cierto agrado el empate. Contó con alguna chance aislada para ponerse en ventaja, aunque le faltó un poco más juego para argumentar el triunfo.

En el complemento, una frase futbolera empezó a sobrevolar la cancha. Daba la sensación de ser
unos de esos partidos. Faltaba que alguno de los 22 se animara a decirla. Tal vez era la fórmula para romper el cero. ¨El que hace el gol gana¨, se podría haber escuchado tranquilamente, como si se tratara de un picadito de barrio. Sin embargo, nadie tuvo la llave para abrir el juego y, en cambio, el Trico encontró firmeza defensiva para cerrar su arco. Con orden y dientes apretados, Sholem sumó de a uno y no se bajó del podio. Ahora le quedan cuatro pasos para ponerle el moño a su objetivo.

Messidona. Galera Lequi. A pedido del público, Licha le sumó lujos a su juego. Un taquito, varios amagues y otras tantas pisaditas formaron parte de su lírico repertorio. Ah, además cumplió con su meta principal: fue una muralla en una defensa que, casi siempre, estuvo firme y ordenada (Se aconseja imprimir esta publicación a riesgo de que este premio sea debut y despedida).

Fusetti. Uno de los rubios de AjCoaj. Sholem sacó una pelota afuera para que atendieran a un
jugador y el cinco rival no tuvo mejor idea que devolverla muy cerquita del arco del Gato Marto
para presionar. Aplicó una insana costumbre de estos tiempos y se ganó algunas recriminaciones.
Por mala leche, lo sacaron en el entretiempo.

Adonai. Los Nicos. El Bainer hizo el aguante en los dos partidos, acompañó al equipo y, para
sumar más porotos, también cuidó a su sobrinito. Trabajo completito para el IBM Boy! Eso sí, otro Nico pidió luces con su risueña acción. Antes de entrar, Anguila Rub le marcó un rival y le avisó que estaba amonestado ¿Qué hizo Pignataro? No bien entró se acordó de besuqueiro, saludó al asombrado rival en la mejilla y generó un coro de risas en el banco.

Franquito. Galera Lequi. Sus agravios hacia la prensa son constantes y cada vez más subidos de tono. Cercena la libertad con la que deben trabajar los periodistas del plantel, los acusa de ¨poner el freno de mano¨ y, mediante metodologías poco democráticas, intenta imponer su visión del fútbol. Por eso levantamos nuestra consigna: ¨Basta de barreras (de cinco) contra la prensa libre. Roja a los intolerantes¨.>